miércoles, 13 de marzo de 2013

The Killing Fields (Los gritos del silencio)



The Killing Fields (en España "Los gritos del silencio") es una película de 1984 dirigida por Roland Joffé basada en las experiencias de tres periodistas durante el régimen de los Jemeres Rojos de Camboya. Ganó tres Oscars en 1984 y está protagonizada por Sam WaterstonHaing S. Ngor y John Malkovich.


Sydney Schanberg (Sam Waterston) es un periodista excesivamente ofuscado por su trabajo. Obtiene sus nuevas exclusivas como corresponsal gracias al buen hacer de su compañero Dith Pran (Haing S. Ngor), cuya habilidad de negociación les permite obtener información donde otros fracasan. Llegan incluso a ser los únicos periodistas que presencian en agosto de 1973 el escandaloso resultado del bombardeo erróneo sobre el poblado de Neak Luong por los B-52 estadounidenses. Una acción terrorista en la capital Phnom Penh hace que Sydney comience a apreciar la auténtica dimensión del conflicto. Esta ciudad, apenas un año y medio después, en marzo de 1975, ya es asediada por las fuerzas del Jemer Rojo. Lo vertiginoso de estos acontecimientos y la falta de información veraz hacen de Phnom Penh un auténtico hervidero con más de dos millones de refugiados. En estas escenas podemos advertir las paradojas de una ciudad sitiada, donde por ejemplo, la población anda escasa de alimentos y sin embargo, están rodeados por cajas y cajas de Coca-Cola. Se respira también un ambiente de extrema tensión en las embajadas, en las que se van refugiando los periodistas de diversas nacionalidades, entre ellos el fotógrafo estadounidense Al Rockoff (John Malkovich) que juega un papel a contra reloj, fundamental para la trama. La situación se vuelve insostenible, con los hospitales atestados de heridos. La embajada estadounidense por su parte, se dispone para una desastrosa evacuación, con cientos de personas agolpándose en sus puertas. Estas escenas avergüenzan a Sydney, al cual un diplomático le da esta desalentadora explicación: "La elección es brutal. Quedarse o seguir con vida". Aparece entonces un gran punto de inflexión en los destinos de Syd y Pran, el cual es una piedra de toque para esta historia.